¿Cuánto Cuesta Instalar un Lavamanos?

El valor promedio de la instalación de un lavamanos varía entre los $40.000 y $80.000 pesos, sin incluir el costo del lavamanos o cualquier otro objeto. Estos precios dependen de que si ya existen conexiones de agua como a red hidráulica de agua y al sistema de desagüe), drenajes, el tipo de lavabo que se necesita, el lugar donde se vaya a colocar y si el cliente ofrece los materiales o los compra un profesional.

La mayoría de los gásfiters cobran un precio fijo, aunque otros también cobran por hora. Pueden realizar desde los arreglos más básicos hasta las modificaciones más complejas.

Instalar un lavamanos puede tomar un par de horas, incluso más si realizas el trabajo por tu cuenta y no tienes conocimientos. Por lo que es recomendable que contactes a un profesional para que se encargue de la instalación, lo cual te asegura que la pieza va a estar bien instalada.

Factores de precio

La mayoría de los gásfiters trabaja con un valor fijo por instalación de lavamanos, siempre que el trabajo sea estándar y sin complicaciones. Sin embargo, cuando la instalación es más compleja, algunos profesionales prefieren cobrar por hora, especialmente si se trata de reparaciones, adecuaciones o trabajos adicionales que no estaban previstos. Cada especialista maneja valores distintos según su experiencia, el tiempo estimado y la dificultad del servicio, por lo que siempre es recomendable pedir una cotización clara antes de comenzar el trabajo.

El costo de una instalación cambia bastante según las condiciones del lugar y el tipo de trabajo que haya que realizar. Uno de los factores principales es si ya existen las conexiones de agua y desagüe en buen estado, cuando el gásfiter debe modificar tuberías, mover puntos o reparar filtraciones, el precio sube porque el trabajo requiere más tiempo y materiales adicionales. También influye el tipo de lavamanos que elijas, ya que algunos modelos necesitan cortes especiales, soportes, refuerzos o preparación de superficies, lo que aumenta la mano de obra.

Otro factor relevante es el estado de los muros, pisos y muebles donde se instalará la pieza. Si el área necesita reparaciones, nivelación o ajustes para que el lavamanos entre correctamente, se agregan costos extra al servicio. Sumado a esto, si el cliente no tiene los materiales necesarios (flexibles, sifón, mezclador, sellos, soportes, entre otros), el gásfiter debe encargarse de comprarlos y esto también se refleja en el costo final.

Tipo de lavamanos

Existen varios tipos de lavamanos, pero entre los tipos de lavamanos más comunes que se instalan están los siguientes:

• Empotrados: Requieren que se taladre un hueco en el soporte para empotrar la pieza, debido a que no van fijos en la pared. Además, hay que preparar la cubierta antes de instalarla, de manera que el lavamanos tenga una base donde se pueda sostener, lo que implica tomar medidas y usar herramientas de trabajo como sierras, por lo que la instalación de este tipo de lavamanos puede ser costosa.
  Por si fuera poco, si se va a colocar en la cocina, es probable que haya que modificar los estantes de la cocina para que todo calce, lo que quiere decir que posiblemente se deban hacer trabajos extra que se sumarán al precio del servicio
   
• Tradicionales: También se conocen como lavamanos de pared y normalmente solo incluyen el espacio para lavarse las manos y los grifos, sin ningún tipo de accesorios adicionales. Se ven mucho en baños y cocinas debido a su gran versatilidad, ya que no necesitan mucho espacio y hacen que la habitación tenga buena apariencia.
  En caso de que quieras agregar un pedestal, seguramente debas pagar un poco más por el trabajo de gasfitería, pero la ventaja es que las conexiones al desagüe quedan ocultas para que la instalación se vea mucho mejor
   
• De pedestal: Son ideales para las personas a las que les guste el estilo retro al decorar, puesto que este tipo de lavamanos se creó hace muchos años. Por otra parte, aunque se cree que el peso del lavabo lo sostiene el pedestal, en realidad es la pared la que aguanta toda la estructura en la mayoría de los casos. Es preferible instalarlos en los baños y no en la cocina, debido a que podría ser poco práctico ocupar un área con el pedestal, cuando se pueden agregar muebles de cocina en ese lugar.

Si la instalación de un lavamanos nuevo requiere hacer una nueva parte del suelo, arreglar una pared o colocar un protector para cerámicas, el precio será más elevado para poder cubrir la mano de obra.

Material del lavamanos

El precio igualmente puede variar dependiendo de los materiales del que esté hecho el lavamanos, por ejemplo:

• Acero inoxidable: Se ve mucho en cocinas porque tiene una larga vida útil, es fácil de limpiar, combina con muchos estilos de decoración, ofrece resistencia al calor, aparte de que es un recurso reciclable e higiénico. Por lo general, un lavamanos o lavaplatos hecho de acero no necesita que el profesional coloque soportes especiales para aguantarlo, así que la instalación suele ser económica si se compara con otros materiales que requieren bases como el granito.
   
• Cobre: Por su maleabilidad o capacidad para adaptarse a diferentes condiciones, los gásfiters pueden adecuar el material para que calce en la superficie disponible, sin necesidad de aplicar técnicas complicadas ni usar herramientas demasiado complejas. Sin embargo, es un material que puede ser pesado y los profesionales necesitan mover la pieza de un lado a otro mientras la están instalando, lo cual se traduce en tarifas más costosas. Ahora bien, habría que considerar si vale la pena pagar un poco más por montar un lavamanos de cobre, ya que evitan que se acumulen bacterias y son resistentes a la corrosión.
   
• Cerámica: No es muy común usar este material al colocar lavamanos, porque su precio es más alto que el de otros tipos de lavamanos, además de que hay que usarlo con cuidado, puesto que se puede rayar y no es muy resistente a algunos productos de limpieza. Sin embargo, son muy vistosos y pueden darle una apariencia de lujo al baño o cocina.

Consejos profesionales

Al contratar un servicio de instalación de lavamanos, ten en cuenta algunos de los siguientes consejos:

• Recuerda que si las paredes y los pisos no están en buenas condiciones, es probable que el gásfiter cobre más por arreglar el área antes de instalar el lavamanos
• En caso de que desees mover las conexiones del lavamanos, esto también implica gastos adicionales
• Si vas a comprar un lavamanos muy costoso, asegúrate de reservar parte del presupuesto para la instalación y otros inconvenientes que podrían surgir
• Puedes consultarle a un gásfiter cuál es el lavamanos que más te conviene, tomando en cuenta tus instalaciones sanitarias.

Contratar a un profesional para instalar un lavamanos es de mucha importancia para evitar filtraciones, daños en las conexiones o una mala fijación que termine generando gastos mayores. Un gásfiter certificado asegura que todo quede bien nivelado, sellado y conectado a la red de agua y desagüe sin riesgos, además de detectar a tiempo cualquier detalle que pueda afectar la instalación, lo que no solo garantiza un funcionamiento correcto y duradero, sino también mayor tranquilidad para ti.